Febrero ha venido copado de buenas noticias. Mientras el ritmo de vacunación a aumentado en las principales economías occidentales, encabezados por Reino Unido y Estados Unidos, el sector manufacturero ha experimentado una fuerte recuperación, con datos de los PMIs en máximos de hace meses. Esta recuperación ha provocado un empinamiento de la curva de tipos americana, suscitando voces sobre la inflación que está por venir. La incógnita pendiente es el paquete de estímulos en EEUU que ha pasado la cámara baja pero le falta la aprobación del Senado.

El inicio de mes poco tenía que ver con el final de enero. Las rentabilidades registradas de los activos de riesgo eran muy elevadas pero la última semana se llevó una parte de esas ganancias. En renta variable, el EuroStoxx50 alcanzaba una rentabilidad de +4,5%, aunque fue el Ibex35 el índice que deslumbró, obteniendo un +6%. El comportamiento de la bolsa americana fue peor que el de la europea, con el S&P500 cerrando con un +2,6%. Sin embargo, el activo destacado este mes fue la renta fija gubernamental. El bono alemán a 10 años, que empezó el mes a un tipo de interés de -0,52 llegó hasta -0,20, mientras que el treasury americano a 10 años sufría un movimiento aún más acentuado, con subidas de la rentabilidad del activo desde el +1,09 hasta tocar el +1,62, pero estabilizándose en la zona de 1,40-1,45. Este entorno de recuperación ha sido caldo de cultivo para que el oro sufriera, cayendo un -6,8% en el mes.

Rentabilidad de los fondos seleccionados y de los índices de referencia

Posicionamiento Y Principales Actuaciones

Parece que un cierre de mes tranquilo es algo que todavía no nos ha dado este 2021. Con las rentabilidades de la parte larga de las curvas de tipos subiendo, la renta variable sufrió, y los fondos que tenemos en cartera, que habían disparado su rentabilidad a mediados de mes, moderaron sus subidas.

La selección de fondos enfocada a temáticas es una estrategia que nos ha funcionado realmente bien durante el año 2020, y es por eso que hemos querido incluir una temática adicional: el 5G. Con esto en mente, hemos entrado en el BlackRock Next Generation Technology, un fondo enfocado a la conectividad de quinta generación y a factores que puedan beneficiarse de ella, como son los vehículos autónomos y el cloud computing.