Sergio Heredia – La Vanguardia – 14/04/2015
La caída de los tipos de interés en la eurozona está complicando la situación de algunas entidades financieras de España, Italia y Portugal, que en el futuro podrían verse obligadas a pagar intereses a sus clientes por las hipotecas que les habían concedido (y que están referenciadas al euribor, que se encuentra en mínimos históricos).
La noticia, que hoy aparece en The Wall Street Journal, abre la puerta a un escenario inédito hasta ahora: la situación responde a la última gran decisión del Banco Central Europeo (BCE), el lanzamiento del billonario plan de compra de deuda pública y privada (anunciado el 22 de enero), una enorme inyección de liquidez que está disparando el precio de los bonos soberanos y, por lo tanto, rebajando la rentabilidad de sus tipos a mínimos históricos. Un buen abanico de miembros de la eurozona ya está pagando por sus títulos de deuda pública. Desde hace una semana, España lo hace por sus bonos a seis meses.
“El problema –dice WSJ- es uno de los muchos retos que está provocando la caída de los tipos de interés a niveles inferiores a cero. En toda Europa, los bancos se están viendo obligados a reprogramar sus programas informáticos, revisar documentos y recalcular balances en función de esas tasas negativas”. “Los bancos podrían verse obligados a pagar intereses a sus clientes, sobre todo en aquellas hipotecas que se firmaron precisamente antes de la crisis, y que en muchos casos fueron del euríbor más el 0,30% o el 0,40%”, dice Xavier Brun, gestor de fondos de Solventis. “Ahora bien, esa posibilidad parece mucho más lejana en el caso de las hipotecas más recientes, cuyo diferencial se encuentra, de media, en el 0,9%”.
Entidades españolas, italianas y portuguesas ya se han dirigido a sus respectivos bancos centrales, alertadas por el goteo constante en la caída del euríbor, que ya se encuentra a las puertas del -0% (en la actualidad, el euribor a un año se encuentra en el 0,188%, muy lejos, por ejemplo, del 4% que registraba en los tiempos previos a la crisis). Para algunos de estos bancos, las respuestas del banco central son preocupantes. El Banco Central de Portugal ya les ha dicho que, si se diera el caso, los bancos tendrían que pagarles intereses a sus clientes. Ahora bien, apunta WSJ, el banco central le ha recordado a los prestamistas que podrían tomar “medidas de precaución” en futuros contratos.
En España, el Banco Central está estudiando el caso, que podría afectar a Bankinter, que en el pasado había concedido diversas hipotecas referenciadas al libor a un mes y en francos suizos, una referencia que se ha puesto en negativo (el libor ha tocado el -0,85% este mes). El cálculo es evidente: si el cliente firmó una hipoteca al libor más 0,50%, entonces ahora el banco tendría que devolverle un 0,35%.